Una iglesia bendecida llamada a ser bendicion

Base Bíblica: Santiago 4:7-8 (RVR1960)

Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros.  Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones.

Objetivo: Que cada asistente a la «Casa de bendición», pueda entender que la única manera de resistir al diablo, es cuando someto completamente mi vida a Dios.

Actividad introductoria. En estos tiempos de pandemia, la única forma que se puede evitar el contagio, es someterse a las direcciones establecidas por el gobierno.

Introducción: Cuenta la historia, que: Había un constructor, quien todo lo hacía de manera excelente y utilizaba la mejor materia prima, para cada una de sus construcciones. Cierto día, un hombre muy adinerado le dice, quiero que me construyas la mejor casa que tú puedas haber construido, el constructor le pregunta si la casa es para él, el hombre le dice: No, quiero regalarla; coloca lo mejor que tienes para esta casa. El constructor no se somete a la dirección que le dieron, construye la casa hermosa, pero utiliza materiales no muy buenos. Al terminar ésta, llama al hombre que lo contrató y le dice: Ya termine la casa que usted me encargó, éste le pregunta, usted hizo todo con los mejores materiales, la hizo como si fuera para mí? Él le respondió: Sí,  cumple con lo que usted me pidió. Entonces la vio y dijo: Está muy hermosa, sé que a la persona a la que le voy a regalar, él y su familia van a quedar muy contento con esta casa.

La sorpresa para el constructor fue, cuando este hombre le dice, esta casa es para ti y tu familia, en agradecimiento por todo lo que tú has hecho para mí y mi familia, espero que la puedas disfrutar y aprovechar al máximo.

Desarrollo del tema: Si queremos vivir una vida sometida a Dios, es de vital importancia cumplir con estos principios:

1. Someternos a Dios: Someterse, es aceptar la autoridad o la voluntad de Dios; en muchas ocasiones decimos que nos sometemos a él, pero cuando vemos que las cosas no salen de la manera que nosotros esperamos siguiendo la dirección de Dios; es en ese momento que hacemos las cosas conforme a nuestra sabiduría y conocimiento, y es ahí donde perdemos autoridad para resistir la situación que estamos viviendo, y lo único que hacemos es empeorar más las cosas y éstas no cambiarán, hasta que no digamos: Señor, perdóname y de hoy en adelante me someto a tu guía y dirección para mi vida.

2. Resistir al diablo: Cuando yo sigo la dirección de Dios, puedo resistir todo lo que el enemigo quiera hacer con mi vida; toda la presión, engaño y frustración que éste pueda colocar en mi vida, no cobrará ventaja en mí, porque estaré firme y lo resistiré; no por lo fuerte o inteligente que pueda ser; lo puedo resistir porque mi vida se somete completamente a la palabra del Señor, la cual me dará la victoria.

3. Acércate a Dios: Acercarte a Dios, es tener comunión con él, búscalo mientras pueda ser hallado. Nosotros tenemos muchos escenarios para acercarnos a él; lo hacemos cuando leemos su palabra, cuando oramos, cuando estamos en la iglesia, en la casa de bendición, en la celebración dominical. Pero no solo debemos estar en cada uno de estos escenarios; el verdadero acercamiento pasa, cuando aplico en mi vida todo lo que aprendo en cada uno de ellos, y de esta forma él se acercará a nosotros y cada día limpiará nuestros corazones y seremos salvos por su palabra.

Conclusión: Cuando recibimos su palabra y nos sometemos a ella, estaremos seguros de que, no importa la dificultad que tengamos, él se acercará a nosotros y seremos limpios por su palabra, esta nos limpiará y seremos perdonados, y juntos veremos su gloria y estaremos firmes para poder soportar ese día malo.