Una iglesia bendecida llamada a ser bendicion

Lucas 6:12-16 En aquellos días él fue al monte a orar, y pasó la noche orando a Dios. 13 Y cuando era de día, llamó a sus discípulos, y escogió a doce de ellos, a los cuales también llamó apóstoles: 14 a Simón, a quien también llamó Pedro, a Andrés su hermano, Jacobo y Juan, Felipe y Bartolomé, 15 Mateo, Tomás, Jacobo hijo de Alfeo, Simón llamado Zelote, 16 Judas hermano de Jacobo, y Judas Iscariote, que llegó a ser el traidor.

Reflexión: Dios tiene un llamado para cada persona, a ser parte de su redil por medio de nuestro señor Jesucristo, y así que nuestras vidas logren ser transformadas y cambiadas por Él; para esto necesitamos:

1. Disposición: Debemos estar dispuestos a ser transformados, además saber que Dios no obliga a nadie a hacer algo que no quiera hacer, por ello es importante decidir de corazón aceptar el llamado que Él hace a nuestra vida y creer en su respaldo.

2. Obediencia: Una persona que tiene el anhelo de obedecer a Dios, entiende que Dios mismo fue quien lo eligió (Juan 15:16); esto lo llevará a ser obediente sin condiciones, lo cual lo llevará y a servir a Dios en medio de sus debilidades y las circunstancias que puedan surgir.

Dios es quien nos esta llamando en este tiempo; depende de nosotros abrir nuestro corazón, dejarlo entrar y reconocerlo como nuestro único y suficiente Salvador, para que gobierne y obre en nuestras vidas.