Una iglesia bendecida llamada a ser bendicion

Isaías 54:10 Porque los montes se moverán, y los collados temblarán, pero no se apartará de ti mi misericordia, ni el pacto de mi paz se quebrantará, dijo Jehová, el que tiene misericordia de ti.

Reflexión: La palabra nos enseña que todo pecado tiene consigo una consecuencia, primeramente trae un distanciamiento de parte de la persona hacia Dios, le asecha la culpabilidad y el remordimiento toma posesión de su mente; pero Dios siempre esta allí para el ser humano diciéndole:

1. “pero no se apartará de ti mi misericordia”: Dios es amor, la biblia lo declara a través de la primera carta del apóstol Juan en (1 Juan 4:8), y sus lazos de misericordia estarán siempre extendidos para perdonar multitud de errores, para librarnos de las garras del cazador y de las pestes venideras, pues gracias a su infinito amor y a su eterna misericordia podemos entrar de forma ilimitada en su presencia, no importa el tamaño de el pecado, ni mucho menos la niebla que pinta un callejón sin salida; Él siempre va a estar del otro lado recordándonos…

2. …“Ni el pacto de mi paz se quebrantará”: Solo Él puede darnos esa paz que sobrepasa todo entendimiento, aquella que no añade tristeza ni incertidumbre; pues la promesa que nos da en Isaías 54:10 la confirma dejándonos a su Espíritu Santo, El cual no se apartará de nosotros, siempre y cuando vayamos a su presencia.

Si Dios nos escogió, nunca nos va a dejar, que se muevan los montes y que tiemble la tierra, pero la misericordia del todo poderoso permanecerá para siempre con nosotros. Así ha dicho el Señor que tiene misericordia de nosotros.