Una iglesia bendecida llamada a ser bendicion

SAN MATEO 23:11-12

EL MÁS IMPORTANTE DE USTEDES, DEBERÁ SER EL SIRVIENTE DE TODOS. Porque los que se creen más importantes que los demás, serán tratados como los menos importantes. Y los que se comporten como los menos importantes serán tratados como los más importantes.»

Dios es claro cuando nos dice, que no debemos creernos más que nadie, que nos ha dado unción y poder, no para vanagloria, sino para reconocer su soberanía.

Como sus hijos debemos ser obedientes a su palabra, y no dejarnos desviar porque simplemente las demás personas nos elogien. Cuando sucede esto, podemos creer que somos nosotros quienes realizamos milagros y prodigios, y no es así; es Dios a través de nosotros, somos solo un instrumento para su gloria. No menospreciemos a nadie.

Porque no somos nosotros quienes decidimos quien es apto o no.  para su reino; tengamos en cuenta que:

UNA PERSONA NO ESTA HACIENDO LO QUE HACE, PORQUE SEA LA MAS INDICADA. LO ESTA HACIENDO ES PORQUE DIOS LA PUSO AHÍ.

Dios no mide tus capacidades, Dios mide tu corazón y tu disposición; porque podremos para el mundo no estar capacitados, pero para Dios podemos ser la mejor opción; la verdadera sabiduría viene de Dios.

DIOS ES QUIEN ESTABLECE, O ES QUIEN QUITA; SI ASÍ LO DESEA NO PUEDES QUITAR LO QUE DIOS PUSO.

Pidamos a Dios que nos enseñe a ver con sus ojos, y que cada día, nuestro corazón se parezca más al suyo, sin envidias, sin rencores; sino  con tanto amor para dar. Dios nos eligió, no fuimos nosotros quien lo elegimos a él.